¿Qué pasa si tomo alcohol con antibióticos?

¿Qué pasa si tomo alcohol con antibióticos?

Hoy queremos hablar sobre una combinación que muchos podrían considerar durante algún tratamiento médico: alcohol y antibióticos. ¿Sabías que mezclar estos dos puede ser problemático? Aquí te explicamos por qué:

¿Por qué no mezclar alcohol con antibióticos?

Primero, es importante saber que no todos los antibióticos interactúan de la misma manera con el alcohol. Sin embargo, hay algunos, como el metronidazol y la tinidazol, que pueden causar reacciones severas cuando se consumen con bebidas alcohólicas. Estas reacciones incluyen náuseas, vómitos, dolor de cabeza, y una aceleración del ritmo cardíaco.

Además, aunque el antibiótico que estés tomando no reaccione directamente con el alcohol, beber puede disminuir la eficacia del medicamento. El alcohol puede interferir con la habilidad de tu cuerpo para combatir la infección y también puede intensificar los efectos secundarios del medicamento, como somnolencia o mareos.

También es importante saber que el alcohol puede ser un agente que deprime el sistema inmunitario, lo que puede complicar aún más tu recuperación.

Por estas razones, los médicos generalmente recomiendan evitar el alcohol durante y por algunos días después del tratamiento con antibióticos. Así que, si estás en tratamiento, lo mejor es priorizar tu salud y evitar el alcohol hasta que estés completamente recuperado.

Recuerda, siempre es mejor consultar con tu médico acerca de las interacciones específicas entre el alcohol y los medicamentos que estás tomando.

¡Cuida tu salud! Y si tienes dudas, recuerda que puedes hablar con nuestros médicos 24/7 por telemedicina.