Las dos caras de septiembre: euforia dieciochera y deterioro de la salud mental
Entrevista a María Paz Maldonado León, psicóloga de Examedi. Atiende a niños, adolescentes y adultos. Terapia humanista, psicoanálisis y cognitivo conductual.
¿Por qué en septiembre, o durante la primavera, la salud mental de los chilenos se deteriora?
Quiero comenzar señalando que el 10 de septiembre es el Día Mundial de la Prevención del Suicidio. Creo que esa información es clave con respecto a esta pregunta.
Todos hemos notado que el mes de septiembre es un mes que se caracteriza por una doble realidad: por un lado, están las fiestas patrias, donde hay alegría, celebración, familia, amigos, diversión y fiestas, y, por otro lado, nos encontramos con noticias que nos informan sobre intentos suicidas o derechamente suicidios.
Existe mucha información sobre esto, pero para quienes no están familiarizados con esta temática, que está directamente relacionada con la depresión, en septiembre empieza a aparecer la primavera, es decir, comienza un cambio de estación, y con esto, se incrementan algunas patologías que afectan la salud mental en la población, a este fenómeno se le conoce como “primavera gris”.
Los días se vuelven más cálidos, hay más sol y la gente tiende a tener mayores actividades al aire libre, que les genera alegría, como, por ejemplo, lo que señalaba al comienzo, en las actividades de las fiestas patrias.
Pero para otras personas, para quienes padecen problemas a nivel de salud mental, este cambio no les produce el mismo efecto, ellos ven como los demás están activos y felices, pero no logran seguirles el ritmo, lo que hace que se angustien y depriman aún más. Es decir, su sintomatología se intensifica.
El entorno social en ocasiones tiende a presionarlos, de convencerlos de que participen, de que se motiven, lo que les genera más presión e impotencia.
¿Qué podemos hacer para cuidar nuestra salud mental durante esta época?
- Aprovechar este cambio de estación, exponernos al sol para la producción de serotonina, hormona que mejora el ánimo y aumenta la energía.
- Llevar una adecuada alimentación.
- Realizar algún deporte o actividad que nos guste.
- Respetar nuestros ritmos de sueño – vigilia.
- Participar de reuniones sociales o familiares, estar con amigos.
- Evitar el uso de drogas o consumo de alcohol.
- Organizar nuestros tiempos de trabajo y de ocio.
- Desconectarse de las redes sociales y dedicarse momentos para uno mismo.
- Darnos tiempo para relajarnos y pedir ayuda cuando creamos que es necesario.
¿Qué hacer si no nos sentimos “festivos” para celebrar este 18 de septiembre?
Depende, debemos evaluar si esa falta de ánimo se debe a algo del momento, por algún evento que nos sucedió o simplemente porque estamos cansados o no somos de las personas “festivas”.
Cuando hay un cambio en mi patrón de funcionamiento habitual y veo que esto está afectando mi vida cotidiana (personal, social, laboral), ahí debemos hacer una especie de “stop”, ver que nos está pasando y ver si necesitamos ayuda. Ver si el cambio de estación nos está afectando o no.
Lo importante es realizar actividades o cosas que nos gusten, no a todos les gusta la música fuerte, bailar o visitar ramadas o lugares, comer empanadas y mote con huesillo rodeados de harta gente, pero es importante realizar actividades de autocuidado que nos permitan relacionarnos y mantener la comunicación con otros, tomar aire, aprovechar el sol y el tiempo libre de acuerdo a nuestros gustos e intereses.