Qué son y cómo prevenir las intoxicaciones por alimentos
Estamos a días de empezar oficialmente el verano, aunque las altas temperaturas nos están acompañando desde hace varios días.
Los medios le han sacado el jugo a algunos temas como el uso de protector solar, la ventilación y la hidratación (de hecho, nosotros también), pero hay uno que se les está olvidando y que siempre está presente junto con el aumento de la temperatura: las intoxicaciones alimentarias.
¿Qué es eso?
También denominadas enfermedades transmitidas por los alimentos (ETA), son un grupo enfermedades o infecciones provocadas por comer alimentos contaminados con algún agente infecciosos como: bacterias, vírus y parásitos, o incluso sus toxinas.
¿Cómo se producen?
Se producen cuando los alimentos se manipulan, se almacenan, se cocinan o se mantienen de manera incorrecta. Esto es especialmente problemático en el caso de los alimentos crudos y listos para consumir, como ensaladas, ceviches y otros, ya que estos no son sometidos a calor por lo que los organismos nocivos no se destruyen antes de comer y pueden causar intoxicación alimentaria.
¿Cuáles son los síntomas?
Los síntomas más comunes son gastrointestinales y comprenden náuseas, vómitos, diarrea e inclusive fiebre. La complicación grave más frecuente de la intoxicación alimentaria es la deshidratación: una pérdida grave de agua, sales y minerales esenciales, siendo potencialmente grave para niños pequeños, mujeres embarazadas, adultos mayores y personas con sistema inmunitario debilitado.
¿Cómo prevenirla?
- Lávate las manos y lava los utensilios y las superficies de los alimentos con frecuencia.
- No consumas alimentos preparados en la calle, ya que no hay acceso a agua para mantener un correcto lavado de manos, de utensilios y de superficies.
- No adquieras productos que deben mantener cadena de frío (carnes, pollo, yogurt, congelados, etc) en lugares en donde no se asegure, como ferias libres.
- Mantén las cadenas de frío de productos como mayonesa, huevos, carnes, pescado o preparaciones que las contengan en las actividades familiares de fin de año.
- Mantén los alimentos crudos separados de los que están listos para comer.
- Al hacer las compras, preparar la comida o almacenar alimentos, mantén la carne de vacuno, la carne de aves, el pescado y los mariscos crudos lejos de los otros alimentos. Esto evita la contaminación cruzada.
- Cocina y mantén los alimentos a una temperatura segura (no dejes la comida lista sobre la cocina esperando que se enfríe para guardarla; divídela en las porciones correspondientes y aplica baño maría inverso para bajarles la temperatura antes de meterla al refrigerador).
- Refrigera o congela los alimentos perecibles de inmediato, es decir, dentro de las dos horas desde que los compraste o los preparaste.
- No descongeles los alimentos a temperatura ambiente. La manera más segura es hacerlo en el refrigerador.
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