Síndrome del impostor: Consejos para superar el sentimiento de “ser un fraude”
¿Has sentido miedo a que las personas descubran que eres un fraude? ¿Crees que algún día se van a dar cuenta de que no eres tan "inteligente" o "capaz" como ellos piensan? Si estos pensamientos han pasado por tu cabeza, quizás estás sufriendo del síndrome del impostor.
Este fenómeno, el cual afecta más a mujeres que hombres, es muy común hoy en día. De seguro si hablas con alguien más, te darás cuenta de que no estás solo en esto.
Si quieres saber por qué sientes que no mereces nada y te gustaría saber qué puedes hacer para revertir la situación, ¡llegaste al lugar correcto!
¿Qué es el síndrome del impostor?
El síndrome del impostor es un fenómeno psicológico que se caracteriza por la dificultad para aceptar nuestros propios logros y capacidades, atribuyéndolos a la suerte o a factores externos.
Quienes experimentan este síndrome, sobre todo las mujeres, sienten que son un “fraude” y que en cualquier momento serán descubiertos como incompetentes, a pesar de contar con una gran trayectoria laboral o de estudios.
Síntomas del síndrome del impostor
Generalmente, las personas que padecen este síndrome suelen:
- Dudar de sus propias capacidades
- Minimizar sus logros
- Evitar el reconocimiento
- Aislarse
- Posponer oportunidades
- Autoexigirse
- Atribuir su logro a la suerte o factor externo.
¿Por qué creo que no merezco nada?
El síndrome del impostor y sus causas son muy diversas. Generalmente, detrás de este sentimiento de no merecer nada o miedo a ser descubierto se esconden factores emocionales y cognitivos como, por ejemplo:
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Baja autoestima
Tener la autoestima baja puede hacer que tú mismo te subestimes y sientas que no mereces cosas buenas en la vida, logros o reconocimiento.
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Comparación constante
Todos nos hemos comparado con alguien más, pero hacerlo constantemente y percibirnos como inferiores, puede hacer que sintamos que no merecemos lo que tenemos o hemos logrado.
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Perfeccionismo
Ser perfeccionista nos lleva a establecer estándares extremadamente altos para nosotros mismos y, cuando no los alcanzamos, podemos sentirnos un “fraude”.
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Depresión o ansiedad
Algunos trastornos mentales, como la depresión y la ansiedad, pueden distorsionar tu percepción de ti mismo y tus logros, haciéndote sentir que no mereces cosas buenas o que tus logros fueron “cosa de la suerte”.
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Falta de validación emocional
Si no has recibido suficiente apoyo emocional o validación en tu vida, sobre todo durante la niñez y adolescencia, es posible que esto haya afectado tu autoestima y tu creencia en tu merecimiento.
Síndrome del impostor en mujeres
¿Sabías que las mujeres son mucho más propensa a sufrir del síndrome del impostor?
El síndrome de la impostora, como también se conoce, afecta mucho más a la mujeres que a los hombres, sobre todo si se trata de los logros profesionales.
¿La respuesta? Inequidad laboral, estereotipos de género, presiones culturales y menos representación en puestos de liderazgo.
Esto se puede manifestar en acciones como:
- No aceptar nuevas oportunidades laborales
- No solicitar aumento de sueldo
- No poner límites
- Dificultad para tomar decisiones importantes.
¿Cómo superar el síndrome del impostor o impostora? 7 consejos para salir adelante
Para superar y tratar el síndrome del impostor o impostora, es muy importante conversar con un especialista en salud mental. Los psicólogos pueden entregarte herramientas para afrontar ese sentimiento de “ser un fraude”.
Además de la terapia psicológica, también te recomendamos estos consejos que puedes poner en práctica diariamente, ¡toma nota!
1. Toma autoconciencia
El primer paso siempre es reconocer y aceptar tus sentimientos. Si constantemente tienes miedo a ser un fraude o crees que no mereces las cosas buenas que te suceden, quizás estás sufriendo síndrome del impostor.
2. Desafía tus pensamientos negativos
Puede ser difícil reemplazar los pensamientos negativos por pensamientos realistas y positivos. Sin embargo, es importante que puedes identificar y cuestionar cómo te hablas a ti mismo y lo que piensas de ti.
3. Celebra tus logros
¡No es suerte! Tus éxitos, tantos personales como profesionales, no son producto del azar o la suerte. Los logros siempre serán producto de tu esfuerzo, capacidad y trabajo.
4. Habla del problema
Si hablas con algún amigo o familiar, te darás cuenta de que no estás solo en esto. Más personas de lo que piensan pueden estar atravesando por lo mismo que tú. Conversar te dará perspectiva y puede ayudarte a aliviar tu carga emocional.
5. Establece expectativas realistas
No necesitas ser perfecto para recibir amor y reconocimiento. Es mucho mejor establecer metas realistas y aceptar que el error siempre nos lleva al crecimiento y nos da la oportunidad de mejorar.
6. Acepta los elogios
Por lo general, cuando alguien nos dice algo lindo sobre nosotros, solemos tirarnos hacia abajo con algún tipo de comentario modesto. ¡Es mucho mejor dar las gracias y aceptar los elogios de los demás!
7. Recuerda tus logros
Ten presente todos los logros que has alcanzado para estar donde te encuentras hoy. A veces nos falta perspectiva para observar todas las metas personales y profesionales que hemos alcanzado.